jueves, 19 de junio de 2014

De tal palo, tal astilla. Una nueva visión sobre la paternidad.


Al leer el título y la trama de la película por primera vez, Like father, like son (De tal palo, tal astilla), en uno de los artículos del Festival de Cannes 2013, me intereso mucho el querer verla. Esta película fue bien recibida en los festivales de cine, llevándose las mejores críticas y considerada como una de las películas revelación de ese año.

Dirigida por Hirokazu Koreeda, él se inició con los documentales, pero el camino de la vida lo llevo a realizar también cine y es así que con su última producción Like father, Like son, ha recibido tantas críticas positivas como negativas.

              
Javier Coña, del Diario El País,expreso: "Quizá este sea un escalón por debajo de ´Kiseki (Milagro)´  y una de sus obras maestras, ´Nadie sabe´, pero aún así sigue siendo una película insólita. Por lo que cuenta y por cómo lo cuenta." 

Y con este comentario antes de ver la película me quede yo. Ya conociendo un poco de la historia, no podía quedarme sin verla, tratando un tema familiar muy delicado y creo yo puede sucederle a cualquiera. He escuchado tantas versiones verdaderas sobre el cambio de los recién nacidos en los hospitales y por ello quería saber que decidiría y qué es lo que  llevaría a las pantallas el Director.

Nos describe a Ryota (Masaharu Fukuyama) el padre, como personaje principal, que posee una familia. Todo va bien, hasta que recibe su esposa (Machiko Ono) una llamada del hospital. Ya estando en el hospital, es cuando reciben la noticia de que su hijo, no es su hijo y que durante 6 años han estado criando al hijo de otra familia.

¿Cómo lidiar ante esto? ¿Qué hacer?, como primer paso, era conocer a la familia que tiene a su verdadero hijo.

Las dudas y los conflictos empiezan a surgir, sin saber que hacer al respecto, tratan de llegar a un acuerdo, tras conocer a la otra familia. Pero, ¿cómo poder elegir?, si primaría en la decisión, el lazo de sangre o la convivencia.

Diferentes emociones, cambios, no saber cómo seguir, y la decisión que toman, es lo que Koreeda nos muestra, una película tranquila, muy reflexiva y la exploración que le dan a los dos estilos de vidas muy diferentes de cada familia.

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